jueves, 10 de octubre de 2013
Ahora...
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Prefiero que compartas conmigo unos minutos, ahora que estoy vivo y no una noche entera, cuando yo muera.
Prefiero que estreches suavemente mi mano ahora que estoy vivo, y no que apoyes tu cuerpo sobre mi cadáver, cuando yo muera. Prefiero que me hagas una breve llamada ahora que estoy vivo y no que emprendas un inesperado viaje, cuando yo muera. Prefiero que me regales una sola flor, ahora que estoy vivo, y no que envíes un hermoso ramo, cuando yo muera. Prefiero que eleves por mi una corta oración, ahora que estoy vivo, y no una eucaristía cantada y concelebrada, cuando yo muera. Prefiero que me digas unas palabras de aliento ahora que estoy vivo, y no un desgarrador poema, cuando yo muera. Prefiero que me escribas unas cortas palabras, ahora que estoy vivo, y no un poético epitafio sobre mi tumba, cuando yo muera. Prefiero disfrutar de los más mínimos detalles tuyos, ahora que estoy vivo, y no de grandes manifestaciones de pesar, cuando yo muera.
¡La vida nos da la hermosa posibilidad de demostrar nuestros afectos a los seres amados, no la desaprovechemos!
“No puedo cambiar muchas circunstancias, pero si puedo cambiar mis reacciones"
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Thursday...
buenos días y felíz jueves para todos ustedes...
los quiero mucho y les envío mi cariño y besos...
Dios los bendiga, amén...
"...el Señor nos corrige para que no seamos condenados..."
(1 Cor 11, 32)
good morning and happy Thursday to all of you ...
I love them and I send my love and kisses ...
God bless you, Amen ...
"... the Lord corrects us lest we be condemned ..."
(1 Cor 11, 32)
los quiero mucho y les envío mi cariño y besos...
Dios los bendiga, amén...
"...el Señor nos corrige para que no seamos condenados..."
(1 Cor 11, 32)
good morning and happy Thursday to all of you ...
I love them and I send my love and kisses ...
God bless you, Amen ...
"... the Lord corrects us lest we be condemned ..."
(1 Cor 11, 32)
Mensaje
Mensaje del Sagrado Corazón de Jesús a Sor Josefa Menéndez, con
comentario
En la
debilidad.
11 DE MAYO DE
1922
Jesús, refiriéndose a
Su Sagrado Corazón, dice a Sor Josefa:
“Cuando te encuentres
más apurada y más débil, ven aquí a buscar fortaleza”.
Comentario:
Si todo nos saliera siempre bien,
seguramente nos olvidaríamos de Dios. Es por eso que el Señor a veces permite
que nuestros planes fracasen, y que quedemos abatidos, para que busquemos
refugio en su Sagrado Corazón, ya que de otra forma no acudiríamos a
Él.
Pero hay que tener cuidado de no buscar
consuelos humanos. Porque puede pasar que al estar tristes y desconsolados,
busquemos consuelo en lo material o en relaciones humanas, cuando simplemente
tenemos qua acudir al Sagrario, a los pies de Jesús Sacramentado, que ha dicho:
“Venid a Mí todos los que estáis afligidos y agobiados, que Yo os aliviaré”. Y
eso es lo que hace el Señor. Es más: para esto justamente se quiso quedar el
Señor en la tierra bajo las especies de pan y vino, para estar a nuestro alcance
y compartir con nosotros todos nuestros problemas, y confortarnos
siempre.
Dios triunfa en la debilidad, como lo ha
demostrado Dios al nacer Niño y de una Virgen pobre, y al morir ajusticiado en
una cruz. Pero allí, en la debilidad, es cuando obtuvo la fortaleza para todos
los hombres. También nosotros, cuando nos sentimos débiles y “nadas”, entonces
es en ese momento cuando estamos más permeables a la gracia de Dios, para
recibirla nosotros y también para obtenerla a otros, entre los que están quienes
más amamos.
Si supiéramos todas las gracias que
recibimos cuando estamos debilitados y acudimos al Señor, querríamos estar todos
los días en ese estado, para hacernos receptáculos de las innumerables gracias y
favores celestiales.
Sagrado Corazón de Jesús, en Vos
confío.
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