jueves, 7 de noviembre de 2013

Reflejos de faros...


Festividad...

† Santoral               

Fiesta de María Mediadora de Todas las Gracias

( 7 de noviembre)


Saludos...


Reinado de Dios...

Evangelio explicado

Mt 11, 7-14. 
Reinado de Dios. 
Y cuando ellos se retiraron, Jesús se puso a decir a las multitudes a propósito de Juan: “¿Qué salisteis a ver al desierto? ¿Acaso una caña sacudida por el viento? Y si no, ¿qué fuisteis a ver? ¿Un hombre ataviado con vestidos lujosos? Pero los que llevan vestidos lujosos están en las casas de los reyes. Entonces ¿qué salisteis a ver? ¿Un profeta? Sí, os digo, y más que profeta. Éste es de quien está escrito: “He ahí que Yo envío a mi mensajero que te precederá, el cual preparará tu camino delante de ti”. En verdad, os digo, no se ha levantado entre los hijos de mujer, uno mayor que Juan el Bautista; pero el más pequeño en el reino de los cielos es más grande que él. Desde los días de Juan el Bautista hasta ahora, el reino de los cielos padece fuerza, y los que usan la fuerza se apoderan de él. Todos los profetas, lo mismo que la Ley, han profetizado hasta Juan. Y, si queréis creerlo, él mismo es Elías, el que debía venir. ¡Quien tiene oídos oiga!”
Comentario: 
Con estas palabras del Señor se quiere dejar en claro que los violentos querían arrebatar el reino de Dios, querían imponerlo por la fuerza. Pero Jesús no es un rey al modo humano, sino que es un Rey divino, y su reino es espiritual. Esto es lo que no querían entender los judíos. Y tan obcecados estaban en esto, que el motivo de la condena de Jesús, es porque los judíos lo acusan de sublevarse contra los romanos, de querer oponerse al César.
También los soldados le tejen una corona de espinas y se burlan de su reinado, e incluso le ponen un manto de púrpura.
Jesús quiere reinar en el mundo, pero no por la fuerza, sino en los corazones de los hombres, y desde allí reinar en toda la tierra. ¡Ay de quien quiere imponer el Cristianismo por la fuerza, pues dañará a Cristo y al mismo Reino de Dios!
No debemos rebajar el Reinado universal de Cristo, a un reinado humano, pues Él es el Rey de todo lo creado, y no es un rey político.