miércoles, 2 de abril de 2014

Ray Conniff - SMOKE GETS IN YOUR EYES. (HQ).VOB

San Pablo...

Cartas de San Pablo.

Profetizar. 
Hermanos, no sean niños en mentalidad. Sean niños en malicia, pero hombres maduros en mentalidad. Está escrito en la Ley: Por hombres de lenguas extrañas y por bocas de extraños hablaré yo a este pueblo, y ni así me escucharán, dice el Señor. Así pues, las lenguas sirven de signo, no para los creyentes, sino para los infieles; en cambio la profecía, no para los infieles, sino para los creyentes. Por ejemplo, si se reúne toda la asamblea y todos hablan en lenguas y entran en ella simples fieles o infieles, ¿no dirán que están locos? Por el contrario, si todos profetizan y entra un infiel o un simple fiel, será convencido por todos, juzgado por todos. Los secretos de su corazón quedarán al descubierto y, postrado rostro en tierra, adorará a Dios confesando: Dios está verdaderamente entre ustedes. (1 Co 14, 20-25). 
Comentario: 
Debemos ser niños para el mal, pero adultos en la fe y en la formación.
Y quien profetiza colabora con la evangelización de la asamblea, porque quien habla en lenguas si bien alaba a Dios, no colabora en la enseñanza de la asamblea.
San Pablo se refiere a que hay que dar prioridad a la edificación del prójimo, hablando de parte de Dios, que eso es ser profeta, y guiar por el camino del bien a todos los hombres, porque ése es el don a que todo cristiano debería aspirar, el de ser guía hacia el Cielo.
Existen otros dones, pero debe preferirse mejor los que están orientados a la formación de los fieles y de los infieles. Así que saltemos de júbilo si el Señor nos ha elegido para que seamos portavoces de sus palabras y mensajes. Porque no hay que saber mucho para predicar, sino más bien hay que amar mucho para ser un buen evangelizador, ya que con las pocas verdades que sabemos, podremos hablar mucho, pues el Evangelio es sencillo y la predicación debe ser también sencilla.

¡San Pablo, ruega por nosotros!