sábado, 16 de julio de 2016

Abuso...

Abuso de la Misericordia.
Dios es infinitamente misericordioso, y su atributo más grande es la Misericordia. Pero también es cierto que Dios es infinitamente justo y que en Él, Misericordia y Justicia van unidas.
Pero hoy se quiere olvidar esto y se habla solo de la misericordia divina, y, en nombre de la misericordia de Dios, se cometen las mayores atrocidades y las almas se exponen a la condenación eterna.
Porque hay más condenados por la misericordia de Dios que por la Justicia.
Sí, esto es así porque muchos cometieron graves pecados amparados en que Dios es misericordioso y han hecho de su misericordia un medio más para burlarse de Dios. Pero ya dice la Escritura que de Dios nadie se burla impunemente. Es necesario que recordemos que en Dios, Misericordia y Justicia son una misma cosa, y que Dios no dejará nada sin juzgar.
El tiempo de la misericordia es el tiempo de vida que tenemos sobre la tierra. Luego del cual llega la muerte y con ella el tiempo de la Justicia divina. ¿Cómo estamos aprovechando este tiempo de vida que tenemos sobre la tierra, en el cual Dios tiene paciencia con nosotros y nos perdona todo? ¿Lo usamos rectamente para ser cada vez mejores y más santos, o por el contrario nos amparamos en la misericordia de Dios para seguir pecando y viviendo tibiamente? Si hacemos esto último, es muy probable que un día nos alcance la justa mano de Dios y que nuestra eternidad sea de horror en el Infierno.
La bondad de Dios debemos aprovecharla para avanzar en el camino del bien, sabiendo que si tenemos la desgracia de pecar, Dios nos perdonará. Pero no hay que abusar y seguir pecando invocando a la misericordia de Dios, porque esto es jugar con Dios y burlarse de Él.
La humanidad está tocando el fin del tiempo de la misericordia y está entrando en el tiempo de la Justicia divina, tiempo en que Dios no dejará impunes tantos pecados de la humanidad.

Convirtámonos lo antes posible y consagrémonos a la Virgen para ser defendidos y amparados de las cosas que han de suceder en el mundo, pues los hombres serán justicieros de sí mismos, ya que Dios y su Justicia dejarán que se desencadenen los castigos del Infierno sobre este mundo pecador.

Reflexiones...

Reflexionando con la Biblia

El hombre, imagen de Dios.
Y creó Dios al hombre a imagen suya; a imagen de Dios lo creó; varón y mujer los creó. Los bendijo Dios; y les dijo Dios: “Sed fecundos y multiplicaos, y henchid la tierra y sometedla; y dominad sobre los peces del mar y las aves del cielo, y sobre todos los animales que se mueven sobre la tierra”. (Génesis 1, 27-28)
Reflexión:
¿Cómo dice la Biblia que Dios creó al hombre a imagen de Dios si Dios no tiene cuerpo? Es porque la imagen a que se refiere es a la imagen espiritual, porque el hombre tiene un alma espiritual e inmortal que es imagen de Dios. Además, el hombre tiene inteligencia, memoria y voluntad, y en esto se asemeja a la Santísima Trinidad, pues son Tres Personas y un solo Dios; y en el hombre son tres facultades pero un solo ser. La imagen similar que tenemos con Dios es nuestra alma. Y cuando se habla de semejanza con Dios, esto se refiere a la gracia, es decir, que cuando un alma está en gracia es imagen y semejanza de Dios. ¿Y qué valor se le da al alma en esta cultura y mundo modernos? Menos que nada, ya que se niega su existencia con el ateísmo teórico o práctico y así el hombre ya no sabe la gran dignidad que posee, sino que los “sabios” de este mundo le hacen creer que él es un mono más desarrollado y nada más. ¡No! ¡Nuestro Padre es Dios y somos vivas imágenes de Él!