jueves, 15 de febrero de 2018

Mensajes...

Mensaje eucarístico

Cuando recibimos la Eucaristía.
Cada vez que recibimos a Jesús en la Eucaristía se reproduce en nosotros el momento de la Anunciación, cuando el Arcángel Gabriel le anunció a María que sería la Madre de Dios y, cuando María dijo sí, en ese mismo momento el Verbo de Dios descendió a su seno y a su corazón. También nosotros, cuando el Sacerdote nos dice: “El Cuerpo de Cristo”, nosotros respondemos amén, y entonces el Señor Jesús baja a nuestro corazón realmente vivo y resucitado como está sentado a la derecha del Padre en la Gloria del Cielo. Recibámoslo con el alma de rodillas y con las mismas disposiciones de la Santísima Virgen.
¡Viva Jesús Sacramentado! 
¡Viva María, su Madre Inmaculada!