lunes, 6 de noviembre de 2017

TOM JONES "She's a lady" (TOTP '71) SUBTITULADA AL ESPAÑOL

Intenciones...

Por las intenciones de la Virgen.

Jesús, en el Evangelio, nos ha dicho que pidamos, que busquemos y que llamemos, que seremos atendidos por Dios. Pero ¿por qué no hacemos algo mejor todavía? ¿Por qué no rezamos por las intenciones de la Santísima Virgen?
María sabe muy bien qué es lo más importante que hay que pedir, porque sabe muy bien cuál es la voluntad de Dios para el mundo y para cada uno de nosotros.
Si rezamos por las intenciones de María, a no dudarlo que Ella se sentirá agradecida con nosotros y nos colmará de favores celestiales y también terrenales, cuando ello no sea obstáculo a nuestra salvación y santificación.
Porque muchas veces atamos el gran poder que tiene la oración, a pedidos mezquinos, o al menos, muy pobres, siendo que debemos pedir mucho. Y como pocas veces sabemos pedir lo conveniente, entonces pidamos por las intenciones de la Virgen, que Ella se mostrará agradecida con nosotros y velará por nuestras cosas.
¿Acaso no es un pacto el que hacemos con María: Que nosotros nos ocuparemos de Sus cosas, y Ella se ocupará de las nuestras?
Sí. Efectivamente la Virgen no olvidará este gesto generoso y heroico de nuestra parte para obsequiarla, y entonces derramará sobre nosotros y nuestros asuntos un río de gracias y favores de todas clases.
Algo parecido hacía la Madre Teresa de Calcuta: Cuando alguien le pedía que rezara por alguna intención, o ella misma quería pedir por algo o alguien, oraba por las Almas del Purgatorio, sabiendo que ellas se ocuparían de esas cosas.
Similar a esto es también el rezar por las intenciones de María Santísima, pues no es necesario detallar todo lo que necesitamos, sino que la Virgen nos dará, con creces, dones mucho mayores que los que pedimos por nuestra cuenta. Quien no lo crea así, que haga la prueba de orar por las intenciones de la Virgen y que vea el resultado.