domingo, 1 de abril de 2018

Resurrección...

¡Resucitó el Señor!

El cuerpo de Jesús no está en el sepulcro.
Hay tres posibilidades:
1) Jesús resucitó;
2) robaron el cuerpo los discípulos y luego dijeron que resucitó;
3) robaron el cuerpo los judíos y enemigos.
Vemos que queda sólo la primera posibilidad: Jesús resucitó.
Porque si los discípulos hubieran robado el cuerpo, no habrían dado la vida por testimoniar que Jesús resucitó, pues nadie da la vida por algo que sabe que es una mentira, una patraña, y ellos murieron a millares por defender que Jesús resucitó.
El cuerpo del Señor tampoco lo robaron los judíos o enemigos, pues cuando los Apóstoles y discípulos comenzaron a predicar y anunciar que Jesús había resucitado, ellos enseguida habrían mostrado el cuerpo muerto de Jesús, demostrando con esto la falsedad de dicha afirmación.
Por lo tanto, usando sólo la razón, queda la primera opción: JESÚS RESUCITÓ.
Que Jesús resucitó es la verdad de fe que fundamenta todo, por eso quien no cree en la Resurrección de Cristo, vana es su fe.
Jesucristo, Dios y Hombre verdadero, ha resucitado del sepulcro, ha ascendido a los Cielos y está a la diestra de Dios Padre, y desde allí volverá a juzgar a vivos y muertos; vivos en el alma y en el cuerpo, y muertos también en el alma y en el cuerpo.
La resurrección del Señor nos asegura que todos resucitaremos algún día, el Último día, para el Juicio, luego del cual cada uno irá con su cuerpo y alma al lugar que le tocará: Cielo o Infierno, y para siempre.
Entonces ¡qué santo debe ser todo nuestro obrar en este mundo! pues todo quedará patente ante el universo entero, y lo que hemos realizado en lo oculto y escondido, se mostrará a los cuatro vientos. Pero para quienes hayan hecho penitencia y se salven, el Señor ocultará sus faltas y pecados y no los mostrará al mundo para que los justos no tengan que avergonzarse por nada. En cambio los que se condenen, sufrirán una vergüenza eterna, sus pecados y maldades serán puestos en evidencia ante toda la humanidad.
Cuando celebramos la Pascua, y deseamos ¡Feliz Pascua!, estamos confesando esta verdad de que Jesús ha resucitado y nosotros resucitaremos con Él algún día.
Pero también la resurrección comienza ya desde este mundo, pues cuando vamos dejando de lado el pecado, y nos hacemos mejores, entonces ya estamos resucitando a una vida nueva, ya vamos dejando el hombre viejo para revestirnos, ya aquí en la tierra, con el hombre nuevo.
Entonces, sabiendo mejor ahora lo que quiere decir el saludo: “Feliz Pascua”, les deseo a todos, una muy Feliz Pascua de Resurrección.