sábado, 25 de febrero de 2017

Reflexiones...

Reflexión mariana

Las lágrimas de María
¡Cuántas lágrimas debió derramar María! Cuando tuvo que huir a Egipto con su Niño perseguido a muerte, cuando lo perdió en Jerusalén, cuando despidió a Jesús al comenzar su misión, y tantas otras veces tuvo que llorar María, y por nosotros, pues estas lágrimas junto con la Sangre de Jesús son el precio de nuestro rescate de las manos de Satanás. Por eso confiemos en María, pues si Ella lloró por nosotros, ahora no nos dejará librados a las fauces del Mal e intercederá por nosotros ante su Hijo y ante el Padre eterno. Como decía un piadoso sacerdote: “En cada gracia que recibimos hay una gota de Sangre de Jesús y una lágrima de María”.