sábado, 3 de septiembre de 2016

Evangelio del día...

sábado 3/SEP/16

Evangelio del día.

Lc 6, 1-5.
Día dedicado a la Virgen.
Un sábado, en que Jesús atravesaba unos sembrados, sus discípulos arrancaban espigas y, frotándolas entre las manos, comían. Algunos fariseos les dijeron: “¿Por qué ustedes hacen lo que no está permitido en sábado?”. Jesús les respondió: “¿Ni siquiera han leído lo que hizo David cuando él y sus compañeros tuvieron hambre, cómo entró en la Casa de Dios y, tomando los panes de la ofrenda, que sólo pueden comer los sacerdotes, comió él y dio de comer a sus compañeros?”. Después les dijo: “El Hijo del hombre es dueño del sábado”.
Reflexión:
Muchos milagros el Señor los realizaba en día sábado. Y ahora también, ya que el sábado es el día dedicado a su Madre Santísima. La Iglesia siempre dedicó el sábado a María, pues es el único día en que la Virgen estuvo sin Jesús. Efectivamente, después del Viernes Santo, Ella pasó todo el sábado santo orando, llorando y esperando la resurrección; y ese día es el primer día de la maternidad universal de María, es el día en que comienza a ser Madre de todos los hombres. Sigamos esta piadosa costumbre y dediquemos el sábado a la Virgen, haciendo algún pequeño sacrificio u obra de caridad, y rezando algo más o algo especial por Ella.
Pidamos a la Santísima Virgen la gracia de amarla cada vez más y entregarnos a ella mediante el acto de consagración a su Corazón Inmaculado.
Jesús, María, os amo, salvad las almas.